lunes, 4 de agosto de 2008

●๋• ي Pαrα un ser muy especiαl ي •●๋° (シ)°


Transitaba por mi mente un pensamiento involuntario:
¿Que sería de mí, si nuestros destinos jamás se hubieran cruzado?, quizá de repente aún me encontraría buscando una salida a ese torbellino de ideas que con el tiempo, decidí nombrarle con propiedad: “mis pensamientos”. Alguna vez me preguntaste, ¿cuál era mi mayor tesoro?, ahora con algunas inquietudes, propias de quien tu aún llamas niña, me invaden las ganas de responderte: que considero mi mayor fortuna el haberte conocido; porque en días como estos, en las visitas que suelo hacer, al viajar en esa maquina que muchos suelen llamar “del tiempo”, me he visto y con ello sin querer a todos mi cambios, he recordado mis temores, y siendo sincera aún me siento con fundamentos para poder justificar, aquel miedo incomprensible que desarrolle por la oscuridad; porque ahora que te veo, mirándome en todo momento, tan atento como cuando solíamos ver nuestras películas favoritas, estoy segura que nunca te resignaste a mi modo de pensar, tampoco a mis extraños gustos por todo aquello que solía tener una cuota de inmaterialidad.
Gracias a ti, puedo ahora decir que se como realmente puede un ser humano al cielo llegar ...y yo que pensaba que hacía falta muchísima madera para en una escalera las nubes llegar a rozar, que simple fue descubrirte cada vez que me sentía sola, porque para ser sincera esta “niña” ya creció, y sí….ya sé que siempre suelo ser algunos años menor, que nunca harías algo que no pudiera hacerme feliz, … Recuerdas cuando te pregunte de forma muy directa: ¿Que sientes por mí?, pues yo aún recuerdo tu gesto al ver mi reacción, discúlpame nuevamente; pero: Amor, nunca fue una respuesta esperada, ¿cuantos años tenía?, y poco a poco sentía un poquito más que te conocía; yo siento que es toda mi vida, la verdad no me queda la menor duda, son muchos aunque tu insistas en llamarlos muy pocos, los años que llevamos juntos: las rizas, las miradas, los gestos, los abrazos, los reproches y consejos, y el acompañamientos en mis momentos de llanto; que me has dicho que soy muy llorona; pero ¿Quién te entiende?, cuando río mucho, protestas por seriedad; ya sé que no soy perfecta y me has dicho con seriedad: nunca lo serás, te entiendo perfectamente, pues por primera vez logró con total claridad comprender, que lo hermoso de la vida es tener la oportunidad de equivocarse y con ello, poder aprender de los errores, que no se aprende al recordar esos momentos, que aunque cuesta mucho, vale más, si a pesar del dolor y todos los sentimientos, decides salir adelante, como retando a ese que tantos le temen y que como a todo en esta vida, tiene su nombre: nosotros le pusimos “destino”; ahí nuevamente va mi despedida, nunca la cambié porque aunque a ti no te guste, siento que es mejor cuanto se muestra repentina, solo quiero recordarte lo mucho que te quiero, sí ya sé, ganaste la apuesta, algún día tenia que ser, ¡lo admito!, siempre era yo, la que en esta relación nunca admitió sus sentimientos, ahora sí, me despido de una forma oficial y directa hacia ti, aunque como a lo largo de esta historia, siempre me acompañas, siento que si causas inquietud en alguno de estos lectores, quizá con el tiempo les cause gracia, el hecho de saber que también siempre estás con ellos, ya son mas de 2mil años no?.

1 comentario:

αdяΐαηΐтα!* dijo...

Aishhhh me encantan tb cuando te pones en tus minutos de inspiracion y todo lo q escribes reinaaaa ... y menos mal que no se nota que lo dices por Lear jajajajajajajajaja! .. mas evidente no pude ser ¬¬ jeje anawayyy! Te Adoroo y q weno que ya tienes tu blog, y que bueno que ya estas publicando jejee ..

Espero saber más de ti, y leer más de lo que te pueda estar pasando..

TAdoroooo!
Tkm!(=